(Reuters) - Las acciones de Tesla caían cerca de un 2 por ciento el lunes, después de que el presidente ejecutivo de la compañía, Elon Musk, abandonó su plan de sacar al fabricante de autos eléctricos de la bolsa.
El declive se produjo en medio de comentarios de analistas que indicaron que la firma necesita sangre nueva en los puestos directivos más altos para mejorar su posición frente a los inversores.
El multimillonario empresario dijo en una publicación en un blog en la noche del viernes que las consultas realizadas con la ayuda de Goldman Sachs y Morgan Stanley mostraron que los actuales accionistas de Tesla se oponen al acuerdo que propuso en Twitter hace tres semanas, y que provocó un gran impacto en Wall Street.
“Esperamos que (...) los últimos 17 días lleven al directorio por el camino de nombrar un CEO (presidente ejecutivo) más operativo o, como mínimo, un COO (presidente operativo)”, escribieron analistas de Cowen and Co en una nota a sus clientes.
Las acciones de Tesla, que ya han caído casi un 15 por ciento desde el pico tocado el 7 de agosto, cuando Musk tuiteó que tenía el “financiamiento asegurado” para realizar una recompra por 420 dólares por acción, se desplomaron inicialmente más de un 5 por ciento en las operaciones europeas previas a la apertura de los mercados en Nueva York.
No obstante, se recuperaron y cedían en torno a un 2 por ciento, a 316 dólares, al comienzo de la sesión en Wall Street.
Notas de analistas pusieron en duda la credibilidad de Musk ante una posible investigación por parte de la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos sobre la veracidad del tuit enviado el 7 de agosto.
“La implicación de Musk en la compañía es crítica, pero es crucial ahora más que nunca un número dos sólido -alguien con un fuerte historial operacional- que pueda ayudar a Tesla a ejecutar sus ideas”, escribió en una nota a sus clientes el analista Joseph Spak de RBC Capital Markets.
El multimillonario empresario dijo en una publicación en un blog en la noche del viernes que las consultas realizadas con la ayuda de Goldman Sachs y Morgan Stanley mostraron que los actuales accionistas de Tesla se oponen al acuerdo que propuso en Twitter hace tres semanas, y que provocó un gran impacto en Wall Street.
Las acciones de Tesla, que ya han caído casi un 15 por ciento desde el pico tocado el 7 de agosto, cuando Musk tuiteó que tenía el “financiamiento asegurado” para realizar una recompra por 420 dólares por acción, se desplomaron inicialmente más de un 5 por ciento en las operaciones europeas previas a la apertura de los mercados en Nueva York.
No obstante, se recuperaron y cedían en torno a un 2 por ciento, a 316 dólares, al comienzo de la sesión en Wall Street.
Notas de analistas pusieron en duda la credibilidad de Musk ante una posible investigación por parte de la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos sobre la veracidad del tuit enviado el 7 de agosto.
Reporte adicional de Helen Reid; editado en español por Carlos Serrano
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